
Nieva pero sale el sol. O sale el sol pero nieva. Mejor aún, nieva pero es como si hiciera sol.
Regresiones a otros tiempos en que jugaba con la nieve. Y ver cómo cae un copo contra un cristal, se deshace y se convierte en agua me hace ver la vida en su apogeo.
Pero el sol (sí, mi sol) aparece cuando menos me lo espero. Por suerte. Y dan ganas de quemarse los labios de besarle y de darle mil abrazos hasta convertirse en ceniza.
El sol es peor que la luna con las mareas, al menos con mis mareas...me fluctúa de tal forma que ya no sé ni lo que digo y claro, aburro a los pastores y a los soles (en este caso Gran Sol, como aquel topónimo conocido por pescadores).
No, no diré algo tópico y típico: que calienta. No hablaré del invierno ni de las primaveras y verano. Bueno, de este sí, pero de su agonía, tiempo en el que me deslumbró el sol. Y aparece, sobre todo de noche, para decirme...y... y con cada cosa que me cuenta, (o que calla) da luz a las flores, germina los campos, los girasoles no saben a qué sol acudir, la gente despierta, el gallo quería cantar pero enmudece...
Noticias:
"Unas 800 personas quedan atrapadas por la nieve en Badajoz"
"La nieve cae sobre Écija por primera vez después de treinta años "
"Una persona congelada asegura que el sol está brillando ahora mismo en Madrid"
Adivine cuál es la importante de todas...