Thursday, December 22, 2005

EL CAOS, EL (DES)ORDEN, LA SUERTE, LA CAUSALIDAD


Caminando, veo en la puerta de lo que solía ser mi colegio, una pintada. Expresa, con una palabra, algo genial: kaos (no sin su símbolo de anarkía).
El caos. El desorden. ¿Por qué será que seducen tanto? Muchos hacen dios a la anarquía (como sinónimo de desorden). Todo porque el equilibrio asusta, o porque no lo encuentran. El caos, cómo no, tiene su parte de orden. Disfrutemos de la paradoja y hagamos una organización (con su orden) del kaos. Esa palabra es transgresora porque asusta cuando se oye. Todo por el miedo a querer controlar cada detalle minuciosamente, como si se pudiera de verdad manejar a alguien. Como si de verdad, la ciudad tuviera cámaras (puede que el Gran Hermano no esté en las grabaciones de Amsterdam, Marcos, sino en el miedo de la gente a lo imprevisto; pero de Orwell y de Holanda sabes mucho más que yo).
Y pienso en estas fechas cómo se puede confiar tanto en lo imprevisto (véase la lotería) y temerlo tanto (véase la peor designada mala suerte). Gran contradicción del ser humano. ¿La suerte (tanto buena como mala) tiene acaso un orden? Preguntémosle a la causalidad, porque yo sólo tengo preguntas y ninguna respuesta, ya que temo que el día en que sepa todas las respuestas, me cambien las preguntas, como le pasó a aquel.
Sólo dejo una observación más, un guante lanzado: ¿el caos no suele ser pareja de baile del cosmos?

1 comment:

jorgeimer said...

La mala y la buena suerte son pareja de baile. Y siempre van de la mano.