Tuesday, April 04, 2006

SONRIENDO A LA GENTE


La sonrisa torcida, la mueca desdibujada, picassiana, la media sonrisa. La monalisa sin códigos ni diablos, ni libros, ni best-sellers. La sinsonrisa coloreada de plata, sin casi blanco marfil, blanco dental. Gran fallo del Ingeniero: el mismo orificio para comer, respirar, hablar...(eso de orificios pluriempleados no se le da muy bien)
La nube negra, la maldita suerte. La piedra una y otra vez, quizá la misma. El gran peñón. "No puedo pasar por él, no puedo rodearlo...", decía la canción de la infancia que versionamos tantas y tantas veces.
Sonrisa para la gente del metro que no deja de observar. Sonrisa para la gente de la calle que se cruza mientras vas cantando. Sonrisa para tus adentros, pensando que no saben por qué sonríes, por qué crees que debieras sonreír. Sonreír con todas las teclas del piano, con todas las fichas del dominó, con todas las notas, las ovejas del campo, con todas las tizas de la clase, con todas las rayas, incluso las que aún no colonizaron las banderas de colores parquimetrales.
Y siempre la misma razón para la sonrisa. El viento de las velas, que aunque a veces acerca problemas, siempre despeja los nubarrones. Prueba de ello: hoy sol de justicia (sí, ese que te deja ciego).

2 comments:

jorgeimer said...

Por que vas to ciego, porque van to ciego, porque te vas, porque se marchan, porque se van,porque te marchas.
"Sonrie siempre, sonrie sobre todo en malos momentos. Nunca sabrás quien se puede enamorar de tu sonrisa"

Anonymous said...

Haga sol o no, tengas suerte o no, sonríe, porque "más vale una triste sonrisa que la tristeza de no volver a sonreír..."