Monday, June 19, 2006

SERENATA EN MI MAYOR


Compás, compás, compás. Ya no tengo con qué hacer más círculos. Ahora a copiar a la luna por las noches, siempre y cuando sea llena, pues ya no me queda paciencia, el pelo me crece y el tiempo me dilata, el estómago se resiente y uno nota como su yo, su super yo, su infra yo, su mega yo, y demás zarandajas, se convierte en un alter ego capaz de sacar aspectos diferentes de uno mismo y de cambiar de respiración tan fácil como si fuera parte de un ejercicio teatral.

La Serenata para Cuerdas en Mi mayor fue compuesta por Dvorák durante el mes de mayo de 1875. André Lischké califica esta página musical como una “obra poética, intimista, de rica invención melódica”. Como no, intiMISta. Incluso YO diría intiMISMISta. Según Lischké, en esta obra “Dvorák busca la unidad del conjunto a través del principio cíclico”. Hombre, alguien que me recuerda a MÍ, siempre cíclico, siempre dando muntas. Lo que pasa es que mis serenatas tienen otro sentido en cuanto a lo clásico se refiere, otra acepción.

Porque siempre soy diferente a los demás (o eso me creo). Yo, por supuesto. Yo, mi, me, conmigo, pero esta vez, con otros.

3 comments:

Uqbar said...

y que me dices de Ravel... ese si que le dió mundas al vuelto... toda una obra repitiendo la misma melodía con distintos instrumentos...Según un estudio científico esta repetición provoca una demencia transitoria... claro ser una voz con distintos disfraces a veces marea

gErT said...

a lo mejor no era demencia, sino esquizofrenia...

Uqbar said...

Más que probable ;) y tal vez tampoco fuera Ravel, puede que se llamase... el tiempo lo dirá