Monday, September 03, 2007

EL RINCÓN MÁS TRISTE DEL MUNDO

El rincón más triste que nunca conocí no era siquiera un rincón. Me susurraba con tenue voz que se consumía y me tendió la mano. Yo sólo acerté a darle un pañuelo y estaba a medio usar. El lugar se fue escapando, primero como un punto de fuga, luego centri-fugado. Y desapareció del mapa como si tal cosa. Es curioso, nadie echa de menos la tristeza, pero a veces viene como agua de mayo, como aquel (mi) lugar que se fue, poco a poco, dando vueltas y en silencio.

1 comment:

Anonymous said...

...a veces es mi corazón, que le cuesta respirar cuando se siente castigado en un rincón...
K.